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Constelaciones sistémicas

Definimos las constelaciones sistémicas como una tecnología social que da acceso a partes del conocimiento implícito de una persona o grupo, y convierte este conocimiento en disponible para la comunicación y el diálogo creativo.

Constelaciones de management

Utilizamos frecuentemente el término “constelaciones de management” para identificar la variante específica de esta tecnología que hemos desarrollado específicamente para su uso en un contexto de management. Los aspectos distintivos principales son:

• Se centran en temas de management
• Se integran en procesos de consultoría, coaching o decisión, y se utilizan en combinación con otros métodos.
• Los propios managers intervienen como representantes.
• El proceso de creación colectiva de sentido es parte integral de la constelación sistémica.

Conocimiento explícito e implícito

Distinguimos entre el conocimiento explícito, que está disponible para la comunicación verbal y puede ser expresado en palabras, figures, diagramas, etc. del conocimiento implícito, que guía nuestras acciones y comportamiento sin ser conscientemente reflexionado.
Los dos aspectos del conocimiento son particulares de las dos funciones de nuestro cerebro descritas por, entre otros, Daniel Kahneman como Sistema 1 y Sistema 2. El comportamiento humano viene determinado por la interacción de estos dos sistemas.

Las constelaciones sistémicas como diálogo

El diálogo, en el espíritu de David Bohm, es una conversación grupal que fluye libremente en la que los participantes tratan de alcanzar un entendimiento común, experimentando el punto de vista de todos los demás plenamente, en igualdad y carente de juicio. Podemos considerar a la constelación sistémica como un diálogo escénico.

Lenguaje transverbal

Para nuestro propósito, definimos las constelaciones sistémicas (de acuerdo con Matthias Varga von Kibéd) como un lenguaje que combina el movimiento del cuerpo (u objetos) en el espacio con la comunicación verbal para procesar la información y desarrollar el conocimiento.

Las constelaciones sistémicas como un tipo de Teatro

Nos acercamos a las constelaciones como una forma específica de teatro. El cliente es el autor del guión, el consultor o el coach es el director de la representación. La función del director es la de ayudar al autor a desarrollar su historia sobre el escenario.

La diferencia principal entre las constelaciones sistémicas y otras formas de teatro (como el role-playing) es que los actores se centran primordialmente en expresar sus percepciones e impulsos, y no en actuar o representar activamente en su papel.

Mapas mentales

Utilizamos la metáfora de mapas mentales para describir la forma en que el conocimiento se almacena en nuestro cerebro. Esta metáfora es coherente con el hecho de que nuestro cerebro se estructura como una red de conexiones entre diferentes neuronas.

Como en todos los mapas, muestran algunos aspectos del territorio, mientras que otros son omitidos. Un mapa “cobra vida” cuando lo leemos e interpretamos, y realizamos nuestros movimientos de acuerdo a él. Lo mismo se puede decir del conocimiento almacenado en nuestros mapas mentales. Afirmamos que en una constelación sistémica representamos los mapas mentales (en referencia a un fenómeno específico observado en un sistema social) y actuamos de acuerdo a dicho mapa.

Sistema

Nos referimos a “sistema” como una forma específica de representación de entidades complejas que observamos en nuestro mundo. Un sistema es el resultado de una operación cognitiva consistente en trazar un límite que abarca una variedad de objetos que entendemos como relacionados entre sí y que queremos observar como conjunto. El límite distingue el sistema de otros objetos que consideramos parte de su entorno. Dentro de los límites establecidos, identificamos elementos específicos e investigamos el signo y magnitud de la interacción circular ente dichos elementos.  En el entorno, distinguimos otros elementos y analizamos su interacción con el sistema como un todo.

Recalcamos la diferencia entre un sistema como representación de algunos aspectos específicos de una entidad (organización, familia o individuo) y la entidad en sí misma. La diferencia es comparable a aquella que se da entre el mapa y el territorio, o entre el menú y la comida. En el lenguaje coloquial se tiende a mezclar los dos conceptos. A nuestro juicio, esto crea confusión.

Cuando utilizamos la expresión “sistema social”, nos referimos a un aspecto específico del patrón comunicativo dentro de un grupo de gente, y no al grupo en sí.

Modelo conceptual

Utilizamos este término para identificar los elementos estructurales de la teoría que elegimos para representar en una constelación. La selección de la teoría y de su modelo relacionado es informada por la pregunta central que dirige el proceso de consultoría. Podemos considerar la pregunta como la base o el eje para el modelo.

Tratamos de asegurar que los elementos del modelo incluyan todos los aspectos relevantes que permiten encontrar una respuesta a la pregunta. El modelo incluye, de forma implícita o explícita, una hipótesis sobre la interacción entre los elementos.

Utilizamos el término meta-modelo para identificar las estructuras básicas o arquetípicas que pueden diferenciarse más allá para describir la situación concreta que queremos analizar.

Resonancia

Resonancia es el concepto que utilizamos para describir la forma en que la información no verbal se intercambia entre clientes y consultor, y también entre los representantes y eventuales observadores.

La resonancia es un proceso fisiológico influido por el modo en que una persona centra su atención. Puede ser entrenado y, en cierta medida, podemos controlar deliberadamente la resonancia mediante el centramiento de la atención y la intención.

Co-creación

La co-creación es el proceso en que cliente, consultor y posibles representantes u observadores modifican sus mapas mentales y su percepción, tanto implícita como explícita, sobre una situación.

El proceso de co-creación afecta a todas las personas involucradas, pese a que su contribución sea diferente, y pese a que también difiera el efecto sobre su comportamiento diario. La co-creación se experimenta en los niveles cognitivo, emocional y fisiológico.

Consideramos que las constelaciones sistémicas son en esencia un proceso de co-creación.

Información

Utilizamos este término tal y como propone Gregory Bateson: “una diferencia que genera diferencias”.  Esto implica que la información depende de la persona para quien la diferencia genera diferencias. En otras palabras, depende del sentido y significado que la persona atribuye a la diferencia observada en un contexto específico.

Por tanto, compartir información requiere que los socios se centren en el mismo contexto. 

Verdad

Utilizamos el concepto de verdad con mucha precaución. No sostendríamos que una constelación revela una verdad absoluta u objetiva.

No obstante, se puede decir que la información obtenida en una constelación sistémica es verdadera, si el significado atribuido por el cliente a determinada evolución de la constelación es lo suficientemente congruente con las dinámicas que está experimentando en la situación real, representada en la constelación.

Para garantizar que nuestras intervenciones se acercan lo máximo posible a la realidad de los clientes, procuramos estar en resonancia con ellos en cada fase del proceso cocreativo de la constelación sistémica.

Solución

En nuestro enfoque, una solución es una respuesta creíble a la pregunta que se ha definido junto con el cliente. Habitualmente, es el siguiente paso que el cliente decide dar. La solución resulta de la integración del conocimiento implícito y el explícito de clientes y consultores. Se puede percibir como un cambio mental, emocional y fisiológico, y a menudo se asocial con una sensación de alivio, claridad, certeza e, incluso, belleza.

Principios sistémicos de orden

Los denominados “Principios sistémicos de orden” son un elemento importante en la práctica clásica de las constelaciones. Sin embargo, no creemos que un concepto universal de principios de orden sea útil en un contexto organizativo o empresarial.

Entendemos que los órdenes realmente relevantes para tomar buenas decisiones de gestión (tanto si se trata de gestionar un negocio, una organización o la propia vida personal) dependen de una cultura concreta, por ejemplo, del conjunto de valores y normas compartidas en una comunidad. Ciertamente, algunos de esos valores y normas tienen una naturaleza más arquetípica. El orden en las organizaciones se determina fundamentalmente por la naturaleza del proceso que genera los productos y servicios que son su razón de ser.

Utilizamos los denominados principios sistémicos (derecho a ser incluidos, prioridad del miembro más antiguo, equilibrio entre dar y tomar) como criterios que merece la pena comprobar. Pueden ser o no relevantes en una situación concreta. Centrarse demasiado en ellos, especialmente con espíritu normativo, puede más bien desviar de las dinámicas relevantes en un momento dado.

Flujo de poder de acuerdo al sentido de las agujas del reloj – la llamada gramática del trabajo en constelaciones.

Según nuestra experiencia, uno de los patrones que encontramos de forma más constante es lo que denominamos “el flujo de poder en sentido de las agujas del reloj”: parece que la persona situada a la derecha es percibida como más poderosa respecto a la colocada a la izquierda, mientras que quien está en la izquierda siente que de algún modo está al servicio del de la derecha.

No utilizamos este hallazgo de forma dogmática, sino más bien como una orientación para elaborar nuestras hipótesis y probar movimientos alternativos.

Campo de saber

Evitamos el uso del concepto de campo de saber, que es bastante citado en la comunidad de constelaciones, porque creemos que el conocimiento atañe a las personas, quienes se comunican y actúan entre sí, y no para una entidad externa o aun superior. A este respecto, el concepto de campo de saber puede desorientar, y preferimos hablar de una mente colectiva o, mejor, de un cuerpo-mente colectivo, para describir el fenómeno de la nueva información que emerge del grupo.

Representantes

Vemos a la persona que representa un elemento concreto de una constelación como un actor en un juego de rol. La diferencia entre el trabajo de constelaciones y los role-playing radica principalmente en las reglas de la actuación y en las instrucciones del director.

Sumergirse en diferentes papeles y sentir y actuar desde ellos es una habilidad humana. Asumimos que los representantes adquieren su información de la comunicación entre las diversas personas involucradas. Dicha comunicación sucede en diferentes niveles (especialmente al asignar al representante una posición específica dentro de la constelación) y se procesa de acuerdo a los patrones o programas almacenados en sus cuerpos y mentes. Algunos de estos patrones son compartidos por toda la humanidad, mientras que otros son culturalmente específicos.  Por tal razón, las reacciones de los representantes pueden aportar información valiosa para la situación representada.

Cambios en los niveles estructurales (Strukturebenenwechsel)

Hay personas que temen que en una constelación sistémica aparezcan algunos elementos personales o familiares de forma no intencionada. Sparrer yVarga von Kibéd denominan este fenómeno como un cambio en los niveles estructurales.
Estamos firmemente convencidos de que esto únicamente ocurre si el consultor interpreta, implícita o explícitamente, el comportamiento de los representantes desde un nivel personal o familiar, y actúa desde ahí. Esto implica que el
cambio estructural sucede en la mente del consultor y no en la constelación. Si el consultor se limita constantemente a la pregunta del cliente y al contexto de la temática, se evita la emergencia de cuestiones familiares o personales no deseadas.