Artículos
Principios que inducen a confusión
Georg Senoner
Los llamados Principios Sistémicos de Pertenencia, Orden y Equilibrio entre dar y tomar son tema principal en la mayoría de las formaciones en Constelaciones Organizacionales. Estos principios se derivan de la teoría de Bert Hellinger sobre las dinámicas familiares y se adaptaron a las organizaciones. En los sistemas familiares tienen un claro sentido. Nacemos en una familia y no hay manera de que podamos cambiar a nuestros padres y hermanos. Tampoco podemos cambiar el orden temporal en el que llegamos a este mundo con todas sus consecuencias. Por último,existe una ley natural que gobierna el equilibrio entre dar y tomar en las familias: nunca podemos devolver a nuestros padres el regalo de la vida y, si la relación de intercambio entre los miembros de una pareja se desequilibra demasiado, se arriesgan a separarse. No respetar estos principios puede tener serias consecuencias para nuestro bienestar.
Reflexiones sobre los principios sistémicos en las organizaciones
Enrique Sacanell
Hace un par de meses, Georg Senoner publicó un breve artículo en el blog del IOCTI (programa de entrenamiento internacional Intensivo en Constelaciones Organizacionales) bajo el título “Misleading principles”, que podemos traducir por “principios que inducen a confusión”. Su lectura me ha generado dos reacciones diferentes.
Quitarse de en medio o un paso por detrás del cliente
Maru Sarasola
Hace ya un tiempo que vengo haciendo una reflexión sobre mi lugar como facilitadora en un ámbito muy concreto como es el acompañamiento a las organizaciones en procesos de cambio hacia la igualdad oportunidades de mujeres y hombres. Tengo la sensación de que hay una forma de hacer que, aun habiendo dado sus frutos en el pasado, parece agotada y produce más bien atascos y, muchas veces, reacciones en contra. Los motivos que, desde mi experiencia, se me ocurren darían para varios post que seguramente escribiré en algún momento.
Constelaciones de management con Georg Senoner: La importancia de hacer como si creyeramos
Asier Gallastegi
Dejar de creer
De chaval fui monaguillo. Con diez años ayudabamos en las celebraciones de Semana Santa en la parroquia de mi pueblo. Formábamos parte, como atrezzo, de una representación importante. Una obra que conectaba lo humano con lo divino. Y no lo hacíamos desde el público, compartíamos espacio con los directores de escena. Desde la platea lo que ocurría allá arriba era un misterio, desde aquella perspectiva privilegiada teníamos la oportunidad de descubrir lo humano detrás del misterio. Eran detalles muy sencillos; como se encendía el incensario, de que fraile eran las ropas que vestíamos,…